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   Javier Olleros, dueño y chef del Culler de Pau, comenzó su carrera como cocinero siguiendo la tradición de su familia. Sus padres eran propietarios de un hotel en O Grove, municipio de la provincia de Pontevedra.

  Estudió cocina en la Escuela Pública de Hostelería de Compostela. Javier  aprovechaba para hacer prácticas en restaurantes de renombre mientras cerraba el hotel por 4 meses. Pasados 4 años, montó su propio restaurante, el Culler de Pau.

   Un edificio pequeño minimalista con 10 mesas que cuenta con unos ventanales que dan vista a la boca de la ría de Arousa. Nominado como restaurante revelación en el Madrid Fusión 2010, su cocina se basa principalmente en pescados y mariscos de la zona, con vegetales recién recolectados, reformulando platos inspirados en la tradición gallega.

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